martes, marzo 13, 2007

LA PROPAGANDA

-FIN-DE: RESUMEN DE LO PUBLICADO. Ayer, sorry, estaba cazando bisontes. Y, a su vez, esta mañana a primera hora la realidad aún estaba copada por la mani del sabadete. Lo que explica una de las funciones de la mani del sabadete. Copar también el domingo. Gracias a esa dinámica, con el domingo pasó lo que pasa los domingos, esos artilugios de 24 horas que pasan sin pena ni gloria. El domingo, por cierto, era 11-M.

-LO COPADO Y EL COPÓN. El objetivo de la mani, por tanto, se cumplió / se cumple con creces. Prueba del éxito real de la mani son, incluso, estas líneas, en las que hablo de la mani del sabadete y no, pongamos, del domingo, o del empate épico del Barça. Ese éxito es una metáfora de lo que está pasando. Lo-que-está-pasando: por primera vez en 30 años de CT/ Cultura de la Transi –esa cultura de Estado-, el ritmo, las iconografías, lo que es y lo que no es, la capacidad de copar, no es del Estado. De lo que se puede sospechar que, quién marca el ritmo es algo más fuerte y menos definible, glups, que el Estado. Cuando esa cosa vuelva a ser Estado hay como para salir pitando.

-UNA CULTURA PROPAGANDÍSTICA. El éxito comunicativo de la mani, la facilidad con la que una mani, o lo que sea, puede copar varios días, explica también la facilidad de la cultura española para coparse, la facilidad de la CT para ejercer y consumir publicidad. La CT es, de hecho, una cultura propagandística. El intelectual, por aquí abajo, considera una de sus funciones la propaganda.

-HUMMMM.
La CT es una máquina de propaganda de la democracia española. Defiende que la Transi fue la pera y que España, a través de un proceso ejemplar que tira de espaldas, es un producto finalizado que vive al límite su democracia. En la CT han salido últimamente dos sectores propagandísticos que, de hecho, opinan lo mismo. Pero al revés. La Brunete parte de la idealización propagandística de la Transi para dibujar un presente terrible, y defender una vuelta al pasado idílico y constitucional como para una boda de la Transi. Que, glups, en ocasiones se encuentra muy atrás en el tiempo –tanto que, hace una semana, los chicos de la COPE dejaron ir que la gallina de la bandera franquista era un símbolo constitucional-. La CT clásica, chachi, a su vez, ve en las nuevas aportaciones de la Brunete un alejamiento de la CT clásica. La novedad de toda esta dinámica es que, lo dicho, la extrema-derecha local es la que marca el ritmo. Pasa en la realidad y pasa en la blogosfera. Si se fijan, las páginas de pollos de la izquierda se dedican a decodificar y desargumentar los grandes argumentos de la extrema-derecha española. Las cyber-izquierdas, como las izquierdas en la realidad, en vez de explicar las izquierdas, nos dedicamos a explicar las cyber-derechas/ derechas a palo seco. Como si en verdad, todos esos silogismos de ultraderecha, en los que se integra en el pack constitucional elementos ultranacionalistas y franquistas, merecieran explicarse a un niño de más de 5 añitos. En fin: ellos son. Nosotros, no. Bueno. Les hablaba de copar la realidad.

-CIMAS PROPAGANDÍSTICAS. Copar la realidad es una de las señas de identidad de la cultura española / Cultura de la Transi / CT, una cultura cuya función es crear cohesión y adhesión en torno a un sistema político. La Transi. Ninguna otra cultura europea practica esa especialización, ninguna otra cultura europea consagra a sus intelectuales la defensa de su sistema. Más bien, en Europa, a), se espera del intelectual cierta defensa ante el sistema, o b), incluso, no se espera nada de él. La especialización española, por otra parte, convierte a la cultura en algo parecido a la publicidad. De hecho, publicita. Los profesionales de esa cultura tienen, por otra parte, un oficio sencillo. Deben de publicitar el mundo desde el punto de vista de su partido / su sector de la CT. Deben copar. Hay, fundamentalmente, dos puntos de vista disponibles. El punto de vista de un partido se parece al punto de vista al que se accede desde el Everest, una montaña muy prestigiosa, pero desde la que no se ve un pijo. Sólo se ve, en ocasiones, el horizonte. Pero no el abismo que te separa de él. La CT –subsector Brunete, más y mejor-, describen la realidad desde la altura simbólica. Pero es incapaz de describir la microrealidad. La vida, en fin, es difícil de describirse en términos de propaganda. La vida, en fin, es rarísima.

-DOS ESCUELAS DE PUBLICIDAD, O PRESENTE Y FUTURO DE LA CULTURA ESPAÑOLA. Le veo mucho futuro a la cosa brunete. Es como muy pop. Ofrece mixed-emotios, aventura, pasión, una explicación democrática a 40 años de disctadura fascista, esa cosa, tan de cultura pop, que es la lectura del mundo en clave de conjura secreta. Una serie tan mala, como Expediente X, vivió varias temporadas gracias al recurso de la conjura. La Brunete puede vivir varias generaciones practicando ese género. Si no llega la sangre al río. Si llega, a su vez, se tardará mucho en verla. Cuando llegó el 11-M –ese día que ya ha sido copado por la propaganda- se tardaron 3 días en verla. Y eso que la enfocaban todas las cámaras del mundo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ayer me tragué varias tertulias sobre la manifa. los tertulianos, brunetes y no brunetes, asumían que la cifra de los 2.000.000 era falsa. Discutían por otras cosas. Lo que indica que la mentira en este país no es un tema interesante. Como pasa, en efecto, en la propaganda.