sábado, febrero 26, 2005

EL ESCENARIO COMO UNA FORMA DE FABRICAR POLÍTICA. Y, ÑACA, PERIODISMO.

La secuencia lógica de la que les hablaba el último día y que se resume, como pueden ver en la pizarra, en la ecuación: ola-de-frío-es-la-pera = hombre-del-tiempo-es-importante = la-realidad-son-escenarios-sucesivos, tiene su juego de piernas. Seguidamente, si deciden quedarse a ver qué, ejercitaremos las piernas, siguiendo ese pegajoso ritmo.

-CONSTRÚYASE SU PROPIO ESCENARIO. ¿Cómo se construye un escenario? Ni idea. No soy hombre del tiempo. Supongo, y corríjanme, que la cosa puede funcionar así. Para un político es fácil situar un escenario. Por ejemplo, haciéndose el longui en la concesión de entrevistas y en el control de la información que emite, y practicando el periodismo de declaraciones. Cuando le ponen una alcachofa cerca de la boca de la cara, el político va y empieza a dibujar un escenario. ¿Es el político el hombre del tiempo? Puede ser. En todo caso, diversos hombres del tiempo, y casi a tiempo real, recogen el escenario cutre que ha montado en un plis-plas el señor de las alcachofas, le dan una ITV y lo convierten en el escenario del día, de la semana, de la temporada. Si bajan sus ojos al siguiente párrafo, les cuento un caso práctico, a ver si les convenzo.

-EL ESCENARIO. UN CASO PRÁCTICO. Esta semana Bush y ZP han coincidido en una reunión de escalera. En ese encuentro, Bush le dio la patita a ZP y, mirando al horizonte, agregó: “Hola amigo, ¿cómo estás?”. ¿Esto es un escenario? No, es una XXXXX pinchada en un palo. No obstante, a los pocos minutos, Mariano Rajoy empezó a escenificar la escena proto-escenario. En Libertad Digital, ese medio de la ultraderecha que hizo un curso CCCC de informática, se empezó a definir la escena como escenario –escenario: usted se encuentra aquí: en un país sin política exterior, interior ni de entretiempo, con un Presi al que el Presi de los USA le trata en plan Tío Tom-. Paralelamente, diversos hombres del tiempo en diversas radios intensifican y dan los últimos retoques al escenario. En las siguientes 48 horas, los hombres del tiempo exprimen el escenario a lo largo de tertulias, artículos. Todos se ubican en el mismo escenario, si bien interpretan la obra –obra titulada Hola amigo, ¿cómo estás?-, desde una prosa antigubernamental y vinculada al PP, y desde una estilística más o menos gubernamental y vinculada al PSOE o a cierta izquierda. No hay, en todo caso, otra posibilidad de obra teatral. El escenario es igual para todos.

-MEDITEMOS, HERMANOS. Ahora que releo lo que he escrito, se me ocurren dos cosas en las que no había pensado. El hombre del tiempo, el verdadero rey del pollo frito de los hombres del tiempo planetarios en toda esta sucesión de hechos que han convertido un saludo en un escenario, ha sido Rajoy. Es decir, un político de un partido fuertemente vinculado con diversos grupos de comunicación a los que, para que lo entiendan los niños, se les ha dado en denominar Brunete Mediática. Estando en la oposición, en un periquete ha montado un escenario. Si estuviese en el poder, hubiera tardado menos. De lo que se deduce que la teoría del escenario, que puede explicar cierta teoría de la emisión y de la recepción de información por aquí abajo, dibuja un país / un por aquí abajo en el que el poder político influencia mucho al periodismo. Y en el que hay una determinada manera de construir política que, socorro, necesita una determinada de construir periodismo. La segunda meditación es esta: un político y un periodista nuevos, no vinculados a la Cultura de la Transición, deben de ser, por tanto, aquellos que no recurren a la teoría del escenario. Me voy a la camita. Antes, me fumaré un pito y meditaré si conozco, al menos, un político que cumpla ese perfil. Buenas nochezzzzzzz, amiguitozzzzzzz.

No hay comentarios: